La evangelización instrumental
El historiador de la Sociedad de San Pablo, Giancarlo Rocca, en sus Apuntes y documentos para una historia, se cuestionaba si Alberione había sido el primero en identificar la buena prensa con la predicación, ya que esa idea se venía realizando tiempo atrás. Es decir, otros habían transitado un camino similar como: san Juan Bosco, Arnold Janssenn, Antonio M. Claret, etcétera. Estos habían asumido la buena prensa, pero desde una óptica subsidiaria, adicional. En cambio, la particularidad de Alberione se centra en que él la propuso como un objetivo único y con una especificidad propia (sus miembros serían sacerdotes, religiosos periodistas, tipógrafos y publicistas).
Tuvo que pensar muy bien cómo plantear esta imperiosa relación entre lo que era palabra-escrita y palabra-oral. Su propósito no quedaría solo en esta interrelación, sino que había que llegar a una instancia divulgativa y significativa en la Iglesia. Formular esta ecuación entre lo escrito y lo oral fue todo un desafío para nuestro Beato, ya que esta iniciativa estableció las bases para lo que hoy conocemos como la predicación instrumental o evangelización.
Como se trata de un momento muy trascendental, nos parece necesario presentar una síntesis de la carta dirigida a la Santa Sede , entre fines de noviembre y comienzos de diciembre de 1922. P. Alberione, en forma directa y simple, les expone lo siguiente:
Me permito precisar la finalidad específica de nuestra Pía Sociedad de San Pablo. Ella se propone hacer con la palabra escrita lo que los predicadores hacen con la palabra hablada. Es decir…
1.- Crear colegios para periodistas y escritores, sacerdotes y laicos, con estudios específicos, con profunda cultura teológica y con las virtudes de los que escriben para difundir la doctrina cristiana...escritores que no utilicen su pluma ni para crearse una posición, ni para vanagloria, ni por interés, sino solo por amor a Jesucristo y a almas.
2.- Realizar el trabajo tipográfico, con el solo fin de la mayor gloria de Dios, por lo tanto sin sueldo, y con el mínimo gasto; de tal manera que nuestros impresos puedan ser ofrecidos a los párrocos, a las obras pías, a las asociaciones católicas, con un precio mínimo.
3.-Difundir la buena prensa y luchar contra la mala, mediante: creación y mantenimiento de bibliotecas y salas de lectura; fundación y gestión de diarios católicos, publicación de hojas populares de instrucción y apologética, etc.
La casa es pequeña, y se halla apenas en sus comienzos; es niña, por ahora, aunque ya hay siete sacerdotes, que pronto serán doce, cuenta con un buen número de clérigos; empero, el trabajo principal es la formación de los jóvenes a los que se imparten cursos de teología, filosofía, humanidades, como también la instrucción y el trabajo tipográfico, y además la educación y formación moral de los alumnos, postulantes, novicios.
Pero ahora se escribe, se imprime y se difunde ya un número notable de impresos y rogamos a su E. Rvdma. Aceptar en obsequio las publicaciones que salen durante cada semana y, a través de ellas, podrá conocer lo que se realiza en el curso del año.
Rogamos por lo tanto a su E. Rvdma. Que permita a esta institución predicar con la palabra escrita, junto al sacerdote que predica con la palabra, constituyéndose (en congregación) a norma del can. 673 del Código de Derecho Canónico.
De acuerdo con el tenor de la misiva para P. Alberione, no fue nada fácil obtener el placet de las autoridades eclesiásticas, ya que en aquella época el tema de la prensa era signo de sospechas y desconfianzas en el ámbito católico, especialmente de las condenas y censuras de la suprema autoridad, desde Gregorio XVI (1831-1846) y Pío IX (1846-1878). Solo a partir del pontificado de León XIII y de Pío X, los católicos verán desde una perspectiva más sociológica el verdadero aporte de la predicación oral y escrita.
Fredy Peña T., s.s.p.
muchas gracias por esos datos. súper interesante lo de la carta de Alberione... muy bueno.
ResponderEliminarGracias por visitar nuestro blog y estamos para responder a cualquier inquietud de nuestra familia.
EliminarSaludos,
Comisión Centenario.
Realmente es fundamental en estos tiempos en que la palabra se usa con los más diversos fines, y sirviendo a todo tipo de intereses, tomar como norte la figura del P. Alberione. ¡Los felicito por el blog, por colonizar este medio que nos ofrece la tecnología para difundir los verdaderos valores de libertad, responsabilidad, respeto por el prójimo, etc.! Sigan adelante...
ResponderEliminarMe uno a los Comentarios anteriores. Felicito a estos "Intre
ResponderEliminarpidos del Evangelio" como he dado en llamarlos, por la mara-
villosa obra que realizan por el mundo, llevando la Buena
Noticia...por todos los medios de comuncacion, incluyendo
el Internet.! Adelante con su mision apostolica...! Que Maria Reina de los Apostoles, los acompanie e ilumine dia a
dia.......!!!!!!!!!!!!!!!!!
ETEL