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miércoles, 26 de septiembre de 2012

En el mes de la Biblia


En diálogo
"Experimentar la protección de Dios"
Mes de la Biblia - 2012
Autor: Lis Anselmi 
www.elangelenelarbol.blogspot.com
lisanselmi@yahoo.com.ar
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Salmo 112 (111)
 
ELOGIO DEL HOMBRE JUSTO
 
Por su forma y su estilo, este Salmo es idéntico al anterior. En cuanto al tema, los dos se corresponden perfectamente: aquel celebra las perfecciones divinas y su obra redentora; este describe la felicidad que proviene de servir a un Dios tan bueno y poderoso.
 
1· ¡Aleluya!
Alef
Feliz el hombre que teme al Señor
Bet  
y se complace en sus mandamientos.
Guímel     
2· Su descendencia será fuerte en la tierra:
Dálet
la posteridad de los justos es bendecida.
He   
3· En su casa habrá abundancia y riqueza,
Vau 
su generosidad permanecerá para siempre.
Zain
4· Para los buenos brilla una luz en las tinieblas:
Jet   
es el Bondadoso, el Compasivo y el Justo.
Tet  
5· Dichoso el que se compadece y da prestado,
Iod  
y administra sus negocios con rectitud.
Caf  
6· El justo no vacilará jamás,
Lámed     
su recuerdo permanecerá para siempre.
Mem        
7· No tendrá que temer malas noticias:
Nun
su corazón está firme, confiado en el Señor.
Sámec     
8· Su ánimo está seguro, y no temerá,
Ain  
hasta que vea la derrota de sus enemigos.
Pe   
9· Él da abundantemente a los pobres:
Sade
su generosidad permanecerá para siempre,
Cof  
y alzará su frente con dignidad.
Res  
10· El malvado, al verlo, se enfurece,
Sin  
rechinan sus dientes y se consume;
Tau  
pero la ambición de los malvados se frustrará.

lunes, 24 de septiembre de 2012

Palabra de Dios


El Beato Alberione en su libro titulado “LEED LAS SAGRADAS ESCRITURAS”

Nos dice:
  • El libro de lectura espiritual preferido debe ser la Biblia. Muchas almas, sedientas de santidad, van por todas partes en busca de algún libro que nutra sus almas  y nunca se satisfacen. Lo que deben hacer es tomar la Biblia, porque sólo en ella encontrarán alimento abundante y sustancial.

De la Sagrada Escritura brota la virtud de la FE:
  • Quien lea con frecuencia y recta intención la Sagrada Escritura, adquirirá una fe vivísima en Jesucristo, y viendo lo que Él hizo por la redención del género humano, le suplicará con fe firme y serena que le conceda los medios necesarios para salvarse.
  • Pero la Biblia no solo nos presenta a Jesucristo como objeto central de nuestra fe, ya que nos describe los ejemplos de hombres caracterizados por una fe grande y admirable, y esto nos lleva a reconocer nuestra fe y aumentarla.

De la Sagrada Escritura brota la virtud de la ESPERANZA:
  • La lectura de la Biblia no solo despierta en nosotros la esperanza del cielo, sino que también aumenta la confianza de que Dios ha de concedernos todas las gracias para merecerlo.
  • ¨Leed la Sagrada Escritura y seréis consolados, pues encontraréis, en ella, todo lo que deseáis. Vuestro corazón se sentirá saciado de todos los bienes que anheláis, aprenderéis a orar y a conseguir el cielo¨

De la Sagrada Escritura brota la virtud de la CARIDAD:
  • ¡Cómo vibra el amor de quien lee la Sagrada Escritura! ¡Qué emoción sentimos  al leer la bellísima parábola del Buen Pastor, donde podemos ver a Dios mismo yendo en busca de la oveja descarriada, al mismo tiempo que, una vez encontrada, la abraza, la toma en sus brazos y la conduce a un lugar seguro!
  • También se enciende y se aumenta el amor al prójimo leyendo, por ejemplo, los milagros realizados por Jesús con los que deja limpios a los leprosos, sana a los paralíticos y a los enfermos de todo tipo, libera a los oprimidos por el demonio, devuelve la vida a los muertos, etc.
 Hna. Fidellis, hsp.

Vida de San Pablo en íconos - 5

Del libro "San Pablo, vida, íconos y encuentros", de la Hna. Teresa Groselj, hsp.


Vida de San Pablo en íconos - 4

Del libro "San Pablo, vida, íconos y encuentros", de la Hna. Teresa Groselj, hsp.

domingo, 19 de agosto de 2012

viernes, 27 de julio de 2012

lunes, 23 de julio de 2012

lunes, 2 de julio de 2012

FESTIVIDAD DE SAN PABLO

 El sábado 30 de junio de 2012, la Familia Paulina celebró la festividad de san Pablo apóstol, con una eucaristía presidida por el Superior Provincial de la Sociedad de San Pablo, P. Agustín Cortés (Argentina-Chile-Perú) y concelebrada por los sacerdotes paulinos.







La celebración eucarística estuvo motivada por otros acontecimientos que se sumaron a la festividad y en este sentido, se dio gracias a Dios por lo siguiente:
               
                Bodas de Oro de
                               Hna. Juana María Scheffer
                               Hna. María Ruth Vivas
               
                Bodas de Plata de
                                               Hna. Virginia Élida Romero

                Votos perpetuos de
                                               Hna. María Gabriela Flores

                Profesión perpetua de los esposos
                                               Marcial Rodas y Herenia Zayas De Rodas
                                               (Instituto Santa Familia de la Sociedad San Pablo).






Luego de la Eucaristía, hubo un compartir fraterno, en el cual pudimos agasajar a las hermanas y también a los matrimonios que festejaron esta nueva etapa de sus vidas.

Agradecemos a las "Hijas de san Pablo" por la organización, la acogida y la atención que brindaron. También al Coro, que con sus cantos amenizaron la Eucaristía y le dieron un marco festivo, armonioso y alegre.



Por estos dones recibidos y por la posibilidad que nos da Dios, día a día, de manifestar nuestra fe, le pedimos a él que nos acompañe siempre, sobre todo para decir como el apóstol san Pablo en su itinerario a la santidad: Yo ya estoy a punto de ser derramado como una libación, y el momento de mi partida se aproxima: he peleado hasta el fin el buen combate, concluí mi carrera, conservé la fe (2 Tim 4, 6-8).

jueves, 28 de junio de 2012

Los exhorto a que sigan mi ejemplo como yo sigo el de Cristo


La Familia Paulina se propone representar y vivir a san Pablo hoy, pensando, trabajando, orando y santificándose como lo haría san Pablo si viviese hoy. El vivió los dos preceptos del amor de Dios y al prójimo de modo tan perfecto que podía mostrar en sí a Cristo mismo: Es Cristo quien vive en mí.

El formó la Sociedad de san Pablo, de la que es Fundador. No fue la Sociedad de San Pablo quien lo eligió a él, sino que él nos eligió, más aún, nos engendró a nosotros: Soy yo quien os ha engendrado para Cristo Jesús.

  
Si san Pablo viviese, continuaría ardiendo con aquella doble llama de un mismo incendio: el celo por Dios y por su Cristo, y por los hombres de todos los pueblos. Y para que le oyeran subiría a los más elevados púlpitos y multiplicaría su palabra con los medios del progreso actual: prensa, cine, radio y televisión. Su doctrina no sería fría ni abstracta. Cuando él iba predicando el Evangelio, no se presentaba para dar una conferencia ocasional, sino que se detenía y se formaba para obtener el asentimiento de la inteligencia, para persuadir, convertir, unir a Cristo y orientar a una vida plenamente cristiana. No se marchaba hasta que no existía en los suyos la certeza moral de la perseverancia. Dejaba presbíteros que continuasen su obra; volvía a menudo con su palabra o con sus escritos; quería estar informado, permanecía unido a  ellos con el espíritu y rezaba por ellos.

El dice a los paulinos: Conoced, amad y seguid al Divino Maestro Jesús. Los exhorto a que sigan mi ejemplo como yo sigo el de Cristo. Esta invitación es general, para todos sus fieles y seguidores. Pero mucho más para nosotros que somos sus hijos. Son apropiadas para nosotros las palabras dirigidas a sus hijos de Tesalónica, a quienes recuerda que se ha hecho “molde” para ellos: Para moldearlos a ustedes. Jesucristo es el perfecto original; Pablo fue y se hizo para nosotros molde sobre el que nosotros hemos de modelarnos para reproducir a Jesucristo.

La Familia Paulina, compuesta por muchos miembros, debe ser Pablo vivo en un cuerpo social. Debemos conocer y meditar a san Pablo en la vida, en las obras y en las cartas, de modo que pensemos, razonemos, hablemos y actuamos como él, invocando su paternal asistencia.

CISP, 1152. Octubre 1954

Tu que has sido

Click aquí para escuchar: Tu que has sido - DR

miércoles, 6 de junio de 2012

Junio: Mes de san Pablo


Nos dice el Beato Alberione:

•          La Familia Paulina fue suscitada por san Pablo para continuar su obra: es san Pablo vivo hoy, pero compuesto por muchos miembros.
•          No hemos elegido nosotros a Pablo, es él que nos eligió y nos llamó. Quiere que hagamos lo que él haría si aún viviese entre nosotros.
•          Él asumiría todos los medios proporcionados por el progreso humano: prensa, cine, radio, televisión y los nuevos descubrimientos.
•          Antes de poner el Instituto bajo la protección de san Pablo se rezó mucho. Se quería un santo que se destacase en santidad y que fuese, al mismo tiempo, ejemplo de apostolado. San Pablo une en sí santidad y apostolado. 
•          San Pablo ha amado verdaderamente a Jesucristo, por eso pudo exclamar: ¿Quién me separará del amor de Cristo? Nada. Ni la vida ni la muerte.
•          San Pablo es el verdadero Fundador del Instituto. Él es el padre, maestro, ejemplo, protector. Él formó esta familia con una intervención, tanto física como espiritual, que ni aún hoy, reflexionando, se la puede entender bien y, menos aún, explicar.
•          Todo el secreto de la grandeza de san Pablo está en su vida interior… Para san Pablo  la santidad es la madurez plena del hombre, el hombre perfecto.
•          San Pablo es el más completo intérprete del Maestro Divino, que aplicó el Evangelio a las naciones y las condujo hacia Cristo.
•          Los hijos deben asemejarse al padre. Todos los amigos de san Pablo deben mirarlo y conocer su espíritu. Cuanto más se leen y profundizan sus Cartas tanto más se lo ama y se entra en el verdadero camino de la santidad y en el verdadero espíritu del apostolado. 
•          Tengan siempre presente el ejemplo de san Pablo que tanto trabajó y tanto sufrió en el ejercicio del apostolado, sin cansarse jamás, hasta poder exclamar: “He concluido mi carrera”. También ustedes, si realizan con fe y con celo el apostolado, al final de su vida podrán decir: “Cumplí el noble apostolado que se me confió. Ahora espero el premio”.

 Alberione, Pensieri, p. 55-62.

sábado, 6 de agosto de 2011

Vida de San Pablo Apóstol


Pablo nació en la ciudad de Tarso, en la actual Turquía centromeridional.

Considerando que en la carta a Filemón, escrita hacia mediados de la década del año 50, Pablo se declara “anciano”, es decir, de más de sesenta años, podemos fechar el nacimiento hacia comienzos de la era cristiana, unos años después de Jesús. Su familia era de estricta observancia judaica (cf Flp 3,5-6).

El nombre romano de “Pablo” (“pequeño, poco”) oculta en realidad el hebreo de “Saulo” (“invocado, llamado”).

En Tarso Pablo pasa su infancia, tal vez hasta los 13 años, frecuentando allí una escuela elemental en ámbito judío, donde aprendió el griego y sobre todo la Biblia en lengua griega. El conocimiento del mundo griego aumentaría más tarde, como demuestran las cartas en algunos puntos específicos: el tema del conocimiento natural de Dios (cf Rom 1,19-20), un cierto vocabulario antropológico (cf 2 Cor 4, 15–5,9), el concepto de conciencia (cf Rom 2,15; 13,5), etc.

Habiéndose trasladado de adolescente a Jerusalén, Pablo asistió a las clases del gran rabino Gamaliel el Viejo (cf He 22,3). Aquí adquirió un profundo conocimiento de la Torá según la escuela de los fariseos (cf Flp 3,5).

No tenemos ningún indicio de contacto alguno con Jesús de Nazaret. Su primer contacto seguro con el naciente cristianismo lo tuvo sin duda en Jerusalén, pero con el grupo de Esteban y sus compañeros: para él, fariseo, tuvo que ser algo chocante oírlos pronunciar “blasfemias contra Moisés y contra Dios”, o sea, contra le Ley y el templo (He 6,11-14). Se enfureció y pasó a la persecución abierta contra la nueva “secta”. Su actividad persecutoria se extendía de Jerusalén a Damasco. Pero precisamente allí Pablo sufrió el vuelco de su vida: “fue alcanzado por Cristo” (Flp 3,12). Según los Hechos, el evento se combinó con el bautismo y una específica iniciación cristiana por parte de la comunidad de Damasco. De ahora en adelante todas las energías del ex fariseo están puestas al servicio de Jesucristo y del evangelio.

Tiene un primer y significativo encuentro con Pedro en Jerusalén.

Bernabé, un judeo-cristiano de origen chipriota se dirige a Tarso a buscar a Pablo para que colabore en las perspectivas misioneras en la ciudad de Siria. Aquí trabajan juntos durante todo un año. Después emprenden un viaje misionero como nueva exigencia de expansión del evangelio (cf He 13, 14), desde Seleucia hasta Derbe, pasando por distintos lugares.

En el llamado concilio de Jerusalén, por la intervención de Pedro y de Santiago el Mayor, se reconoce la actividad apostólica de Pablo.
La metrópolis siria se convierte para Pablo en su sede habitual y normal punto de referencia después de sus viajes.

El segundo y más comprometido viaje misionero, ahora sin Bernabé, lo realiza desde Antioquia de Siria, atravesando diversas regiones, hasta llegar a Corinto, donde se detiene un año y medio y escribe la primera Carta a los tesalonicenses. De allí emprende nuevamente su viaje, llegando incluso a Éfeso, en Asia, hasta volver a Antioquia de Siria.

Desde aquí comienza su tercer viaje misionero: a través de Galacia llega a Éfeso, donde se queda al menos dos años. Aquí “se puso a enseñar diariamente en la escuela de Tirano” (He 19,9). Al llegar a Corinto sufre diversas ofensas, y en la ciudad de Éfeso probablemente sufre también una prisión.

La muerte de Pablo acaeció seguramente en Roma bajo el emperador Nerón y fue violenta: un martirio, con la acusación de pertenecer a un grupo subversivo. Según la cronología más adoptada, es posible que haya sido en el año 64.


(de San Pablo Hoy – http://sanpablohoy.blogspot.com)